eek Dos - Polo

Después de mi primera clase de pole, ¡no podía esperar a volver al estudio y empezar a entrenar con Hannah de nuevo! Durante todo el fin de semana anterior había estado pensando en ello y asegurándome de que recordaba todo lo que había aprendido de... primera semana.

Llegaron las 19:30 del lunes y ya estaba lista para volver a empezar. Como de costumbre, calentamos (después de la primera semana, fui capaz de seguir a Hannah un poco mejor, ¡pero mi coordinación todavía necesita algo de trabajo!

Después de que me enseñaran a hacer una simple subida al poste para acondicionarme, lo intenté por mi cuenta y de repente sentí un horrible dolor punzante en la parte superior del abdomen. Me tomé unos minutos para recuperar el aliento, bebí uno o dos sorbos de agua y me dispuse a intentarlo de nuevo. Pero el dolor volvió. Hannah me preguntó cómo me encontraba y le expliqué el problema. Preocupada, me sugirió que me tomara un descanso antes de volver a intentarlo. Tras el descanso, lo intenté una vez más, pero no sirvió de nada. Por desgracia, tuve que interrumpir la segunda semana de mi aventura con el bastón. Hannah me sugirió que me fuera a casa y que hiciera algunos estiramientos suaves para asegurarme de que solucionaba el problema. También compré unas almohadillas térmicas y una caja de ibuprofeno antes de irme a casa y dar por terminada la jornada. Me sentí fatal por no poder participar, ya que había estado deseando ir a clase toda la semana anterior, pero como mucha gente me ha dicho desde entonces, "tienes que escuchar a tu cuerpo", y el mío me decía que bajara el ritmo mientras tanto.

Lección extra: Yoga aéreo

Después de tomármelo con calma el lunes y el martes, se acercaba el miércoles y mi clase de Aerial Hoop con Ellie. Me preocupaba un poco no haberme dado tiempo suficiente para recuperarme de lo que me había hecho en Pole dos noches antes.

Unos colegas me sugirieron que probara la clase de yoga aéreo que tiene lugar en Ático aéreo antes de mi clase regular de Hoop, ya que es muy relajante y bueno para estirar. El yoga aéreo es algo que me intriga desde hace tiempo, ¡así que no necesité mucho para convencerme!

Llegué para encontrar que mi instructor para la lección era el impresionante Jessica Ashbyotra ex-alumna del show/exhibición X-POLE. Por supuesto, le dije a Jessica exactamente lo que había hecho en la clase de pole dos noches antes sobre mi pequeña lesión.

No tengo palabras para describir lo relajante y divertida que fue la sesión. Después, me sentí completamente zen, ¡gracias Jess! También, gracias por el consejo sobre la respiración adecuada (es decir, exhalar cuando se está a punto de intentar un levantamiento o esfuerzo, esto ayudó enormemente).

Segunda semana - Aro aéreo

Tenía alrededor de una hora de espera entre mi clase de Aerial Yoga y Hoop, así que me aseguré de beber mucha agua y picar un poco de fruta antes de volver a subir las escaleras de la oficina al estudio. Consciente de lo que había hecho en mi clase de barra, hablé con Ellie y decidimos tomarnos las cosas con calma esta semana.

Ellie nos dirigió a través del calentamiento y estiramiento antes de hacernos hacer un poco de acondicionamiento en los aros. Siguiendo al pie de la letra el consejo de Jess sobre la respiración, el dolor fue absolutamente mínimo, podía sentir un ligero tirón todavía, pero eso era de esperar, creo.

Trabajamos en lo que había hecho la semana pasada, específicamente Gazelle y Man In The Moon, pero añadimos la transición a Amazon y también Double Knee Hang .

Debo admitir que esta semana, entrar en el aro y maniobrar dentro de él me resultó mucho más fácil. Creo que ha sido una combinación de acostumbrarme al movimiento del aro (todavía se balancea un poco cuando entro, todavía no lo tengo dominado, pero estoy mejorando) y el miedo a caerme es cada vez menor cuanto más estoy en el aro. Salir del aro sin bajar de un salto es algo en lo que todavía tengo que trabajar, pero estoy increíblemente contenta con mis progresos hasta ahora, tanto en la pértiga como en el aro.

En resumen: asegúrate siempre de calentar correctamente, presta atención a tu respiración, escucha a tu cuerpo y apunta con los dedos de los pies.

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